(A Spanish version follows the English)

We, the board of the Academy of Catholic Hispanic Theologians of the United States and the Executive Committee of the Black Catholic Theological Symposium, reiterate previous ACHTUS statements in support of just, comprehensive, and humane immigration reform. We also reiterate previous BCTS statements about the dangerous ways racism has shaped the Trump administration's rhetoric about immigration.

 

In the strongest terms, we denounce the Trump administration’s recent decisions to criminalize asylum-seekers, to increase detention and deportation of unauthorized residents, and to separate migrant children from their parents. We decry the use of children for political gain while inflicting pain on families. We also denounce the use of tents, in the richest country on earth, to house any person held in detention.

 

We denounce the use of Christian scriptures in order to legitimize cruelty and violence. Furthermore, we reject the use of biblical arguments to support institutional violence against migrants and refugees.

 

We lift up those traditions within the Bible that measure justice according to society’s care for those most vulnerable, God’s little ones (e.g., widows, orphans, displaced persons).

 

Additionally, we affirm Catholic teaching regarding the human right to migrate.

 

Therefore, we support legislation and policies that sustain union between all loved ones crossing any of our international borders, and we will work toward achieving this goal.

 

(Declaración en español)

Nosotros, los miembros de la Junta Directiva de la Academia de Teólogos Católicos Hispanos de los Estados Unidos (ACHTUS, por sus siglas en inglés) y el Comité Ejecutivo del Simposio Teológico Católico Afro-Americano (BCTS, por sus siglas en inglés), reiteramos previas declaraciones de ACHTUS que apoyan una reforma migratoria justa, comprensiva y humanitaria. También reiteramos previas declaraciones de BCTS sobre las maneras peligrosas en las que el racismo permea gran parte de la retórica del presidente Trump con respecto a la inmigración.

 

Denunciamos de manera contundente la decisión reciente de la administración del presidente Trump de criminalizar a aquellos que buscan asilo y refugio, de aumentar la detención y deportación de residentes no autorizados, y de separar a niños inmigrantes de sus padres. Condenamos el uso de niños y niñas para efectos políticos, causando al mismo tiempo un gran daño a sus familias. También censuramos que en el país más rico del mundo se usen carpas para albergar a cualquier persona que esté detenida.

 

Denunciamos el uso de las Escrituras cristianas para legitimar la crueldad y la violencia. Además, rechazamos el uso del lenguaje bíblico para apoyar cualquier clase de violencia institucional contra los migrantes y refugiados.

 

Realzamos aquellas tradiciones bíblicas que miden la justicia según la manera cómo la sociedad protege a los más vulnerables, a los pequeños de Dios (por ejemplo, las viudas, los huérfanos y las personas desplazadas).

 

Además, reafirmamos las enseñanzas de la doctrina social de la Iglesia Católica que garantizan el derecho del ser humano a migrar.

 

De esta manera, apoyamos esfuerzos de legislación y políticas que preserven la unidad de seres queridos que cruzan cualquier frontera internacional, y trabajaremos arduamente para alcanzar dicha meta.